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martes, 27 de julio de 2010

Campeonato de España de Atletismo al aire libre en Avilés 2010


LA AUTORREGULACIÓN DEL PSICÓLOGO PARA POTENCIAR SU RENDIMIENTO
Por lo general, cuando hablamos de Psicología del Deporte, hacemos referencia al deportista, entrenador y demás componentes de la población deportiva (padres, árbitros, etc.). Y pocas veces se habla del psicólogo, sus necesidades y/o padecimientos.

Para este campeonato de España, si me permiten, quiero hablar del psicólogo, en concreto de mi (experiencias y vivencias).

Creo que hay una labor personal de autogestión tan importante como el propio trabajo con deportistas. Si el psicólogo se autorregula, se encuentrará bien y tendrá una óptima perspectiva profesional, en la que su desempeño será mucho más potente. En este sentido, voy a tocar cuatro aspectos que creo que el psicólogo debe de tener presente: el ser fan del deportista, la ansiedad por la competición, frustración por no conseguir los objetivos planteados y refocalización de la situación.

Ser fan
El psicólogo del deporte debe de ser un fan del deportista. Un seguidor de sus competiciones, resultados, éxitos y derrotas. El deportista debe de percibir su interés y apoyo. Un vínculo especial que va más allá de los encuentros profesionales, que de alguna forma, se extiende antes, durante y después de la competición. Todo esto desde la profesionalidad. Ser fan, no es ser un fanático (desproporcionado) del deportista.

Ansiedad: antes, durante y despues de la competición
¿Eres una persona que sueles ponerte nerviosa?. ¿Ante que situaciones te pones más nervioso?. ¿Qué haces ante estas situaciones?. Aunque estas preguntas podríamos hacérselas a un deportistas, van dirigidas a los psicólogos.
Me explico. Primero, uno tiene que conocerse así mismo (virtudes y debilidades). Y segundo, saber cómo actuar ante las situaciones detectadas como potencialmente estresantes.

¿Te imaginas a un psicólogo más nervioso que el propio deportista? o ¿que durante la competición esté alterado y actúe como un seguirdor (gritando, animando...)?.

La autorregulación es fundamental para estar en las mejores condiciones para trabajar. Serenidad y objetividad.

En este campeonato me pasó algo de esto. Estaba muy involucrado con los deportistas que llevo. Pero creo que un poco en exceso. Tenía muchas ganas de que ellos consiguieran sus resultados. Fui fan, aunque me parece que me pasé un poco. Lo digo desde la reflexión. Por suerte, me dí cuenta a tiempo y pude poner mecanismo para afrontar la ansiedad que me producía esta situación. Relajación (control de la respiración), diálogo interno positivo ("te necesitan tranquilo", "yo soy el profesional") y establecimiento de objetivos (analizar la competición como material de trabajo con el deportista) en este caso.

Frustración
Y si el deportista no obtiene los resultados planteados, ¿cómo te sientes?, ¿qué es lo mejor para el deportista?.
La frustración es una respuesta emocional común al fracaso u oposición. Relacionado a la ira y la decepción, que surge de la percepción de resistencia al cumplimiento de la voluntad individual y consecución de objetivos. Cuanto mayor es la obstrucción, y la mayor de la voluntad, más la frustración es probable que sea. La causa de la frustración puede ser interna o externa. En las personas, la frustración interna pueden surgir de problema en el cumplimiento de las metas personales y deseos, las pulsiones y necesidades, o tratar con las deficiencias observadas, tales como la falta de confianza o temor a situaciones sociales. El conflicto también puede ser una fuente interna de la frustración, cuando uno tiene objetivos contrapuestos que interfieran unos con otros, puede crear una disonancia cognitiva. Las causas externas de la frustración implican condiciones fuera de un individuo, como un camino bloqueado o una tarea difícil. Mientras que hacer frente a la frustración, algunas personas pueden participar en el comportamiento pasivo-agresivo, lo que hace difícil identificar las causas originales de su frustración, ya que las respuestas son indirectas. Una respuesta más directa, y común, es una propensión a la agresión
La tolerancia a la frustración es una capacidad que, además de los deportistas, los psicólogos debemos desarrollar.

Refocalizar la atención
El deportista ha perdido o no ha conseguido los objetivos, ¿y ahora qué?, ¿qué hacemos?. Una actitud positiva, un análisis de lo ocurrido durante la competición (situación actual) y el establecimiento de los objetivos futuros, así como el estudio de las necesidades y aspectos de mejora del deportista, es una línea de trabajo que el psicólogo debe de realizar conjuntamente con el deportista. Acompañar al deportista en su progreso personal y profesional.

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